A lo largo de la historia de la humanidad han existido mujeres increíbles y una de ellas es
Elizabeth Blackwell
a quien personalmente admiro muchísimo, ya que soy mujer y además en unos días comenzaré a estudiar medicina que es lo que más deseo desde la infancia...
Y en verdad le debemos mucho a esta mujer ya que ha sido ella quien abrió el camino para que todas las mujeres ahora tengamos la libertad
de poder estudiar medicina.
Elizabeth Blackwell nació en Bristol (Inglaterra) en 1821, fue la
primera mujer en doctorarse en medicina en los Estados Unidos, y su hermana Emily, la primera cirujana.
En 1831 su familia emigró a Estados Unidos y se hizo ciudadana norteamericana; en su casa dieron acogida a los esclavos que huían del sur hacia la libertad en Canadá. Tras la muerte de su padre en 1838, Elizabeth comenzó a estudiar medicina, con el objeto de convertirse en doctora. Luego de ser rechazada su solicitud en diez universidades, logró ser admitida en Geneva (Nueva York) graduándose en 1849, siendo así la primera mujer doctora en medicina de Estados Unidos.
Viajó a Paris, donde ejerció en maternidad y obstetricia, pero su deseo de ser cirujana no fue posible, porque quedó ciega de un ojo. Volvió a Estados Unidos y con perseverancia y tenacidad
Elizabeth fundó el primer hospital del mundo dirigido solamente por médicas, donde atendían a enfermos pobres y desamparados. Durante seis años trabajó en la pobreza y el aislamiento profesional, pero en 1857, junto a su hermana Emily, abrió una Escuela de Enfermería para mujeres. Años más tarde, en 1868, unió a esta escuela, la Escuela de Medicina para mujeres, donde tuvo como colaboradora a la Dra. Rebecca J. Cole (1846-1922), la segunda mujer negra que se graduó en medicina en 1867. La primera mujer afroamericana fue Rebecca Lee Crumpler (1831-1895) que obtuvo su diploma tres años antes, en 1864.
El hermano de
Elizabeth y Emily, Henry Blackwell se casó en 1855 con Lucy Stone sufragista y defensora de los derechos de las mujeres.
Elizabeth escribió tratados para difundir consejos y recomendaciones sobre la prevención de las enfermedades y cómo mejorar la higiene y la alimentación. Entre sus obras figuran:
"La educación física de las jóvenes"(1852),
"El elemento humano del sexo"(1884) y
"Primeros trabajos para la apertura de la profesión médica a las mujeres"(1895).
Viajó de nuevo a Inglaterra donde instaló la
Escuela Londinense de Medicina para Mujeres. En 1859 Elizabeth fue la primera mujer incorporada al Registro de Médicos de Gran Bretaña. Ejerció la cátedra de ginecología y dio conferencias a los obreros de Londres. Siguió luchando por el seguro contra la enfermedad, por mejoramiento de viviendas de los pobres, por cooperativas para disminuir el precio de los alimentos.
Combinó la práctica médica con su cruzada moral contra la prostitución y a favor de la educación sexual de los jóvenes y con su espíritu activo y emprendedor, desafió a la censura y a los facultativos de su época, logrando abrir la puerta de la profesión médica a las mujeres.
En Estados Unidos la única institución que aceptó mujeres desde su creación en 1871, fue la universidad de Siracusa, fundada por metodistas progresistas.
Elizabeth Blackwell falleció en Hastings, al sur de Inglaterra, en 1910 a los 89 años de edad.
A principios del siglo XX,
en 1910, las reformas del médico Abraham Flexner (1866-1959) impedirán nuevamente la entrada de mujeres a las escuelas de medicina en Estados Unidos. La medicina se convirtió durante varias décadas, en una profesión de hombres blancos de clase media-alta, que cobraban elevados salarios por sus servicios.
Hasta la proxima!!!